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El numero de víctimas mortales por los atentados de anoche en París asciende ya a 129, mientras que los heridos son 352, de ellos 99 muy graves, informó hoy el fiscal general de Francia, François Molins.
Tras la jornada de hoy, marcada por la incredulidad y el luto, la ciudad dará su último adiós a los fallecidos mañana en una misa que tendrá lugar a las 6 de la tarde.
Francia trata de asumir hoy el dolor por los atentados perpetrados el viernes por la noche por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en las inmediaciones del Estadio de Francia y en un barrio de moda en la noche parisina, muy frecuentado por los jóvenes, a pocas manzanas de la sede de la revista "Charlie Hebdo", atacada el pasado enero.
Las últimas cifras facilitadas por las autoridades francesas hablan de 129 fallecidos y cerca de 300 heridos, de los cuales 99 se encuentran en estado de "urgencia absoluta".
Este nuevo ataque se suma a los que ya ha sufrido el país en 2015. En enero, el yihadista Amedy Coulibaly vinculado al Estado Islámico mató de un disparo a una policía municipal francesa que se había desplazado a Porte de Châtillon, al sur de París y asaltó al día siguiente un supermercado de comida kosher en Porte de Vincennes, al este de París, donde mató a cuatro rehenes.
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Pero fue el atentado contra Charlie Hebdo el que desató una indignación sin precedentes en la sociedad francesa, que salió a la calle, como ahora lo ha hecho, sin miedo a defender su libertad.
A partir de esos ataques, París elevó su nivel de alerta antiterrorista y se movilizaron 10.000 militares para proteger el territorio francés, al tiempo que grupos islamistas como el Estado Islámico (EI) multiplicaban sus amenazas contra Francia.
Pero a diferencia del atentado contra ese semanario satírico, centrado en periodistas que habían publicado caricaturas de Mahoma, esta nueva masacre ha tenido como objetivo a la población en general y, dado el momento -un viernes noche- y el lugar -algunas de las zonas más de moda para salir o escuchar música- escogidos, a la juventud parisina en particular.
Duelo nacional
El presidente francés, François Hollande, declaró anoche el estado de emergencia para mantener el orden público y prevenir nuevos ataques terroristas, se cerraron las fronteras (aunque los trenes y aviones han circulado con normalidad) y se han establecido tres días de luto nacional.
Excepcionalmente, la Torre Eiffel, icono de la capital francesa, se encontraba cerrada así como Eurodisney y el Louvre. En la entrada del museo, un cartel indica "Por razón de duelo nacional decretado por el Presidente de la República, el museo permanece cerrado"
