La Revista PODIUM MAGAZINE NEWS, celebro el aniversario del “SEÑOR DE LOS MILAGROS” conmemorando los 24 años de su bendición en la Parroquia de San Agustín en Barcelona.

Ceremonia estuvo celebrada por el padre Maicol, con la asistencia de Jaime Lucano Director de Podium Magazine News, el Cónsul Adjunto del Perú  Sr. Jean Carlo Gallardo Chávez,  Ernesto CARRION SABLICH, Diputado del Parlamento de Catalunya, Rudy Benza Alegría. Teniente de alcalde del Ayuntamiento de Granollers, Susana Clerici,  Regidora, Toni Lopez, Coseller de Distrito y diferentes Asociaciones Presentes

La festividad del Señor de los Milagros es la principal celebración católica en el Perú y una de las procesiones más grandes del mundo

El Señor de los Milagros, Cristo Moreno o Cristo de Pachacamilla es una pintura de la crucifixión de Cristo, de culto católico, ubicada en el Altar Mayor del santuario de Las Nazarenas de la ciudad peruana de Lima y cuya veneración se da principalmente en octubre de cada año.

Según el imaginario popular, la imagen fue pintada en 1651 por un esclavo originario de Angola que fue llevado al Perú, llamado Pedro Dalcón y conocido como «Benito», sobre una pared de adobe, aunque su autoría es disputada. 

La tragedia de 1655

El 13 de noviembre de 1655 a las 14:45 horas, tuvo lugar un terremoto que estremeció Lima y Callao, lo que ocasionó el derrumbe de templos, casonas y las viviendas más frágiles, y dejó miles de víctimas mortales y damnificados. Sin embargo, la pintura permaneció intacta, sin daño alguno.

Desde entonces, se realizaron reuniones para venerar la imagen los viernes por la noche. Con el tiempo, se fue incrementando la peregrinación.

Esteban Ibarra dictaminó que se prohibiesen tales reuniones y que se borrase la imagen, por lo cual entre el 6 y el 13 de septiembre de 1671, y se constituyó al lugar un comité especial dispuesto por el promotor fiscal del Arzobispado José Lara y Galán, un notario, posiblemente el mismo Juan de Uría

Pedro Balcázar, escoltado por dos escuadras de soldados para el caso que se produjese desmanes por la cantidad de curiosos y vecinos que rodeaban el lugar.

El primero en intentarlo fue un pintor que al momento de subir por la escalera hacia la imagen comenzó a sentir temblores y escalofríos, teniendo que ser atendido, intentó de nuevo proseguir con su tarea, pero al subir otra vez, fue tal su impresión que bajó rápidamente y se alejó asustado del lugar sin concretar el encargo.

El segundo hombre, se acercó a la imagen, pero algo vio en ella que le hizo desistir de raspar la imagen. El tercero, fue un soldado real de ánimo más templado, este subió, pero bajó rápidamente explicando luego que cuando estuvo frente a la imagen, vio que esta se ponía más bella y que la corona de espinas se tornaba verde.

Ante la insistencia de las autoridades por borrar la imagen, la gente manifestó su disgusto y comenzó a proferir grandes voces. En vista de lo cual el virrey y el vicario Ibarra decidieron revocar la orden, siendo el mismo quien autorizó su culto. Luego de una visita del virrey y su esposa, dispusieron se levante una ermita provisional. El 14 de septiembre de 1671 se celebraría la primera misa oficial en la ermita.

El terremoto de 1687 y la primera procesión

El 20 de octubre de 1687, a las 4:45 a. m., un violento terremoto que según cronistas de la época duró más de 15 minutos (sic) arrasó Lima junto al Callao, teniendo una réplica a las 6:30 a. m., derribando la ermita edificada en honor al Cristo. Ante la sorpresa general la pared de la imagen del crucificado quedó nuevamente en pie, por lo que se ordenó la confección de una copia al óleo y que por primera vez saliera en andas por las calles de Pachacamilla por idea de Sebastián de Antuñano. Una vez elaborada la copia, se sacó en procesión